Exigen atención «urgente» a doce tipos de bacterias. La Organización Mundial de la Salud publicó este lunes una lista de bacterias resistentes a los tratamientos actuales.
Ginebra (Suiza).- Hay 12 tipos de bacterias resistentes a los antibióticos disponibles que están amenazando la salud de la población y demandan atención «urgente» de los gobiernos, según lo informó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
«Publicamos la lista de las principales bacterias resistentes a los tratamientos que demandan el trabajo urgente de la comunidad científica internacional para desarrollar nuevos antibióticos», explicó Marie-Paule Kieny, subdirectora general para sistemas de salud e innovación de la OMS.
Durante una conferencia de prensa vía Internet, Kieny resumió los criterios de selección aplicados: el nivel de resistencia desarrollado en una década, la mortalidad atribuida, la prevalencia en la comunidad y el costo para los sistemas sanitarios.
El catálogo lo elaboró un grupo asesor de la OMS en enero pasado y se presentó el lunes desde Ginebra. Esos ocho especialistas organizaron la lista en tres categorías de prioridad (crítica, alta y media), de acuerdo con «la urgencia con que se necesitan los nuevos antibióticos». Colaboró la División de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Tubinga, Alemania.
La población más vulnerable a las infecciones graves y con mayor mortalidad -como las infecciones de la sangre (sepsis) o las neumonías- por las bacterias que la OMS considera «críticas» es: adultos mayores alojados en residencias, pacientes hospitalizados -incluidas las unidades de terapia intensiva- con o sin dispositivos de asistencia externa, como un respirador o un catéter intravenoso, y personas trasplantadas o que reciben quimioterapia.
A esa categoría pertenecen las bacterias del género Acinetobacter, las pseudomonas y algunas enterobacterias que colonizan el tracto grastrointestinal, como la Escherichia coli, entre otras. Este grupo mostró signos de resistencia a una gran cantidad de terapias de primera elección, como los carbapenémicos y las cefalosporinas de tercera generación, que la OMS define como «los mejores antibióticos disponibles para tratar las bacterias multirresistentes».
– De alto impacto
En la segunda categoría, de prioridad «alta», aparecen seis tipos de patógenos que tienen alto impacto en la comunidad y cada vez muestran una mayor resistencia al arsenal farmacológico disponible. Son los responsables de problemas de salud comunes en la población, como la gonorrea, úlceras o ciertas enfermedades de transmisión alimentaria (ETA), como la salmonelosis.
La prioridad «media» es para tres bacterias consideradas «una amenaza» porque muestran cada vez más signos de resistencia a los tratamientos, aunque aún responden a algunas opciones terapéuticas.
Kieny atribuyó este problema mundial, con costos medidos para los países en miles de millones de dólares por año, a «la falta de incentivo en la investigación y el desarrollo de terapias de uso breve» y una «distorsión en la promoción» del uso de los antibióticos.
«No se trata de asustar a la población con la aparición de nuevas superbacterias, sino de describir las nuevas amenazas para la salud -insistió Kieny-. Les pedimos a los gobiernos que comprometan recursos ahora para la investigación y el desarrollo público y privado de nuevos antibióticos, antes de que tengan que destinar muchos más recursos para una crisis global mayor en los próximos años.»
A través de un comunicado, Evelina Tacconelli, jefa de la División de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Tubinga, opinó: «Los nuevos antibióticos contra los patógenos prioritarios de esta lista contribuirán a reducir las muertes por infecciones resistentes en el mundo. Esperar más causará más problemas de salud pública y afectará enormemente la atención a los pacientes».
– Una acción positiva
Para María Soledad Ramírez, miembro de la Asociación Argentina de Microbiología (AAM), la lista es un llamado de atención a los gobiernos y la industria farmacéutica, para que trabajen en tratar de frenar la dispersión de estas bacterias multirresistentes.
«Es positivo que una organización como la OMS difunda este documento e incentive dar con una cura para estas bacterias que son críticas», dijo Ramírez, que es especialista en resistencia antibiótica y profesora asistente de ciencias biológicas de la Universidad Estatal de California, Fullerton (CSUF). «Es una gran amenaza para el sistema de salud, tanto en los hospitales como en la comunidad. Hay que reconocer que está el problema para poder solucionarlo.»
– La lista, de acuerdo con la prioridad
Crítica
Acinetobacter baumannii, Pseudomonas aeruginosa y enterobacterias resistentes a los antibióticos carbapenémicos.
Alta
Enterococcus faecium (resistente a la vancomicina), Staphylococcus aureus (resistente a la meticilina y la vancomicina), Helicobacter pylori (resistente a la claritromicina), Campylobacter spp. y Salmonella (resistente a las fluoroquinolonas), y Neisseria gonorrhoeae (resistente a la cefalosporina y las fluoroquinolonas).
Media
Streptococcus pneumoniae (sin sensibilidad a la penicilina), Haemophilus influenzae (resistente a la ampicilina) y Shigella spp. (resistente a las fluoroquinolonas).